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Arquitectos: HAS design and research
- Área: 1150 m²
- Año: 2023
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Fotografías:W Workspace, Fangfang Tian
Descripción enviada por el equipo del proyecto. A principios del siglo XXI, China fue testigo de un notable aumento en la construcción de museos. Las ciudades florecieron bajo el estandarte del renacimiento cultural, la reimaginación histórica y el cuidado social, formando una nueva visión internacional para el paisaje urbano de la nación. Durante las últimas dos décadas—marcadas por eventos monumentales como los Juegos Olímpicos de Beijing, la Expo Mundial de Shanghái, los Juegos Asiáticos de Hangzhou y la pandemia global—las ciudades chinas han transformado. La arquitectura imponente que una vez simbolizó el progreso ha evolucionado hacia un enfoque más humanista, centrado en la vida, artístico y socialmente consciente de la regeneración urbana.
En medio de esta evolución cultural se encuentra el Museo de Arte Simple, un museo de arte contemporáneo que profundiza en las reflexiones de los artistas sobre la sociedad y el medio ambiente. Situado en Anhui, China, en un desarrollo urbano en auge en el borde de la ciudad antigua, el museo une el pasado y el presente. La región, famosa por su distintiva arquitectura de estilo Hui, se caracteriza por elementos icónicos—techos, frontones, columnas y jardines—que cuentan la historia de su significativa importancia cultural estratégica. A medida que la ciudad crece, el museo enfrenta el desafío de infundir nuevo significado cultural mientras honra el legado de sus raíces históricas.
Los arquitectos Jenchieh Hung y Kulthida Songkittipakdee, fundadores de HAS Design and Research, presentan una nueva visión cultural a través de su diseño innovador. Inspirándose en las formas arquitectónicas tradicionales de Anhui, el museo reinterpreta elementos como techos y frontones, transformándolos en un espacio contemporáneo donde el espíritu humano y la interacción social convergen. El diseño extiende la esencia del pueblo de estilo Hui, incorporando un techo flotante y ondulante que evoluciona del frontón, orientado hacia adentro y a prueba de fuego, a una estructura simbólica, abriéndose hacia afuera para abrazar al público. Esta forma continua crea un ambiente interior fluido para la expresión artística, albergando exposiciones de arte, galerías, talleres, salas multimedia, salones de diseño y cafés. La arquitectura fluye sin esfuerzo hacia las paredes curvadas del interior, ofreciendo una traducción elegante de la tradición a la modernidad.
En la planta baja, un amplio espacio gris invita al diálogo, el cuidado y la conexión, reflejando el anhelo de la comunidad local por experiencias compartidas. Este espacio estimula la imaginación, atrayendo a los residentes hacia el arte y la belleza, infundiendo lo ordinario con una sensación de extraordinario. Arriba, el techo dentado del museo ecoa los espacios de exhibición de abajo, sostenido por paredes curvadas que crean un camino serpenteante reminiscentes de los jardines chinos, donde la luz natural y la sombra bailan juntas, creando una atmósfera intemporal. El nivel superior, un centro de oficinas de arte abiertas, continúa la narrativa del espacio de exhibición de la planta baja. Paredes curvadas y ondulantes disuelven los límites rígidos de los espacios de trabajo tradicionales, fomentando la creatividad y la colaboración. De esta manera, el museo trasciende su papel como contenedor de arte, convirtiéndose en un incubador de ideas.
Situado cerca del río Nanfei, a menudo llamado el "Río Madre de Hefei", el museo se inspira en las aguas ondulantes que han dado forma a la región durante milenios. Hung y Songkittipakdee (HAS) capturan ingeniosamente esta fluidez en su diseño, con paredes curvadas y un techo en forma de ola que refleja el ritmo natural del río. A medida que la luz del sol filtra por la tarde, el edificio se convierte en un reflejo viviente de la superficie centelleante del Nanfei—una obra maestra abstracta en sí misma. Durante el día, el techo del museo proyecta amplias sombras sobre la plaza externa, ofreciendo a los visitantes un lugar para hacer una pausa y reflexionar. Por la tarde, la luz se filtra a través de las aberturas, bañando el interior en un resplandor sagrado, creando un espacio de belleza etérea. Por la noche, el museo brilla desde adentro, un faro de pertenencia en el cambiante paisaje urbano.
El Museo de Arte Simple es más que una galería o un espacio de exhibición cultural; es un lugar donde la arquitectura invita a la maravilla, donde el pasado y el presente convergen en una danza intemporal. Los arquitectos Jenchieh Hung y Kulthida Songkittipakdee han creado un edificio que no solo alberga arte, sino que también despierta una profunda curiosidad por la belleza. Ofrece un espíritu intergeneracional, conectando la tradición y la cultura contemporánea en medio de la ciudad de concreto.
